EXPERIENCIAS
AFECTIVAS Y SENTIMIENTOS EN EL PROCESO EDUCATIVO
PRODUCTO 8 PROFR. VICENTE AGUIRRE CARDOSO
Elegí
ser maestro en primer lugar de hechos más no de importancia, fue porque crecí
con familia de maestros, mi padre y mis tíos son maestros, después por un poco
de influencia de mis padres para motivarme a elegir esta hermosa carrera, por
último por convicción y amor a este gran trabajo, desde que hice mis primeras
prácticas en el medio rural, indígena y en zonas urbanas me agradó poder ayudar
a la sociedad contribuyendo con mi granito de arena en la formación de cada uno
de los pequeños que a lo largo de mis casi 10 años de servicio he tenido la
bendición de trabajar con ellos.
Mis sentimientos
el primer día que llegué a clase como docente fue que experimenté mucha curiosidad de
saber qué grados iba a atender, qué y cuántos alumnos iban a estar a mi cargo,
cómo sería mi directora y compañera de trabajo, emoción y felicidad de tener
por fin mi plaza que era la meta a llegar, además muy contento por tener la
dicha que mi plaza me tocará en la zona de Martínez de la Torre, mi tierra.
Las mayores
satisfacciones como docente han sido poder trabajar con los niños y contribuir al aprendizaje de
conocimientos que utilizará a lo largo de su vida, pero no sólo eso, la mayor
satisfacción que tengo es poder contribuir en la formación de buenos ciudadanos
formados en valores, concientizarlos sobre el camino a tomar, sobre los
obstáculos que se encontrarán, pero también señalarles las rutas por donde
seguir y llegar a la meta, obteniendo un bienestar personal, familiar, social y
económico.
En cuanto
a si conozco los problemas afectivos de mis alumnos puedo decir que sí, la
mayoría de los casos. Los principales son, la falta de alguno de los padres,
por lo regular del papá, repercutiendo en su estado emocional y desempeño
escolar; otro es la situación de pobreza en la que viven, relacionado con el
primer problema ya que las madres tienen que salir a trabajar y descuidan a sus
hijos, la mayoría de las veces dejándolos solos en su casa, llevando consigo a
que los alumnos anden mucho tiempo en la calle y no le dediquen ese tiempo para
sus tareas o responsabilidades en casa; originado también de la pobreza es el
hambre, muchos niños todas las mañanas llegan sin desayunar y presentan dolor
de estómago durante la jornada escolar, quitándole concentración y elaboración
de trabajos realizados durante las clases.
Hay
muchísimas historias a lo largo de este camino que pudiera compartir, pero una
breve que me ha enseñado a ser humilde y me hace recordar que debo serlo y me
conmueve, es en la comunidad de Copalillo 1, Atzalan; ya que en la casa donde
nos preparaban los alimentos viven dos niños y de lunes a viernes comíamos con
esta familia, pero en algunas ocasiones al llegar los lunes el niño mayor me
decía “Que bueno que ya llegaron maestro, desde el viernes que se fueron no
hemos comido y hoy ya volveremos a comer”.
Por último
una historia que me haya conmovido sobre algún maestro cuando yo era alumno es sobre mi maestro de cuarto, quinto y sexto grado, mi padre, ya que en sus 30 años de
servicio siempre fue un maestro muy responsable, dedicado con sus alumnos, en
las tardes repasaba a los alumnos más bajos y atendía también a los que iban
más avanzados para enseñarles conocimientos un poco más superiores, logrando
durante 10 años consecutivos el primer lugar en aprovechamiento y fases
estatales; el trato con la gente siempre de respeto, nunca tuvo ningún
problema, al contrario toda la gente lo quiere y respeta mucho, los alumnos que
formó muchos de ellos son profesionistas, otros más campesinos o desempeñan
algún oficio, pero lo que tienen en común cada uno de ellos o nosotros (porque también tuve la dicha de ser
su alumno) es la calidad de personas que son, hombres y mujeres de bien,
trabajadores, responsables, padres y madres de familia que inculcan valores a sus
hijos, lo caracterizaba su control de grupo pero a la vez esa confianza hacia
cada uno de nosotros, la simpatía y alegría en cada una de sus clases, nunca se
veía cansado o dejando pasar el tiempo para cumplir su jornada, ahora que ya se
jubiló le puedo decir “Papá, MAESTRO,
MISIÓN CUMPLIDA, GRACIAS A NOMBRE DE TODAS LAS GENERACIONES!!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario